Hace cinco años comenzamos el desarrollo de nuestro primer título – un simulador de programa especial que simula la realidad de la física en la exploración espacial. Sin embargo, nos dimos cuenta que el tono del juego sería seriamente afectado si cada error del jugador fuese seguido por la muerte de un ser humano digital. Es por esto que necesitamos pilotos que ayudaran a cambiar el tono de la exploración espacial.
La física, la astrofísica, las trayectorias, la combustión, y la gravedad pueden ser unos conceptos muy densos para explicar y aún más si estas desarrollando un juego de exploración espacial. Necesitábamos reflejar la seriedad del tema del juego, pero a la misma vez darle un tono más atractivo para los jugadores. Es importante tener en cuenta que cada error que cometas en el juego se sienta como una oportunidad para el jugador aprender algo nuevo e interesante, en vez de tomarlo como un simple fracaso. Necesitábamos una experiencia más ligera, fresca y alentadora.
Nuestra inspiración vino de la historia más curiosa imaginable: dos niños jugando Space Program con fuegos artificiales en Sao Paulo hace más de una década. Uno de ellos era Felipe Falanghe, nuestro diseñador principal, quien tuvo suficiente creatividad y poca supervisión de sus padres para concebir la idea de atar hombrecitos de papel de aluminio a fuegos artificiales y prenderlos. Le llamo a estos hombrecitos Kerbals, y por muchos años mantuvo el nombre y espíritu de los Kerbals en su memoria y corazón.
Unos años después se encontró trabajando para Squad, en aquel entonces una agencia de marketing especializada en el desarrollo de tecnologías interactivas. Cada año los dueños de la agencia le pedían a sus empleados que aportaran con ideas y proyectos originales y, de ser buenas y viables, se desarrollarían. Felipe era un empleado en Squad por bastante tiempo hasta que un día no pudo más con el estrés de su carrera. Intentó renunciar, pero los dueños le insistían proponer una idea para desarrollar un juego. Sin creer en su suerte, Felipe convirtió su idea de Kerbals y el programa espacial en realidad.
Diseñar Kerbals tenía una simple pero complicada directiva: personificar el espíritu del juego. Tenían que ser incesantes en su persecución de logros científicos sin ser disuadidos por errores y fallas, sin importar cuan malos eran. Tenían que ser ingenieros capaces pero temerarios con un buen sentido de humor dispuestos a seguir en una misión con una muy baja probabilidad de éxito. Los Kerbals morirían unas muertes horríficas, por lo que era importante que el diseño no complicara más las cosas, sino que las simplificara.
Ojos grandes de tamaños irregulares que apuntan en direcciones diferentes muestran que los Kerbals no perciben la realidad de la misma manera que los seres humanos, teniendo una perspectiva distinta que podría ser simplemente incompresible para la gente. Una figura de cuerpo con proporciones caricaturescas y rostros que fueran tanto extrañas pero capaces de tener expresiones humanas. Agrégale un color y un tamaño que solo se imaginaria en la vieja escuela de hombrecitos verdes del espacio, y así tienes Kerbals.
Con grandes cohetes vienen una gran responsabilidad. Los Kerbals están dispuestos a asumir el reto de crear un programa espacial desde cero. Están ansiosos por aprender del Universo y quieren explorar cada rincón del sistema Kerbol, todo en el nombre de la ciencia. No hay errores en Kerbal Space Program, solo oportunidades de aprender la forma incorrecta de hacer las cosas. Es por esto que cada lanzamiento del juego genera nuevos aprendizajes sobre la ciencia y la exploración espacial. Durante todo este tiempo, se recuerda que los Kerbals no ven el mundo de la misma manera que nosotros y que pueden procesar su inevitable caída tanto con todo el entusiasmo como con deplorable horror.
Los Kerbals son tanto el alma de Kerbal Space Program. Una fuente inagotable de prescindibles astronautas dispuestos a exponerse a los peligros de la navegación espacial en nombre del progreso y éxito científico. Al mismo tiempo presentándole al jugador con rostros amigables que solo recuerdan que fallar es divertido.
Sin los personajes pequeños verdes, no hubiésemos podido llevar a cabo un simulador espacial que le interesara a ingenieros, agencias espaciales y escuelas elementares en todo el mundo.
Por esto, permanecerán como una parte fundamental del éxito de nuestro juego, y una gran parte de la razón de porque Kerbal Space Program llega a PS4.
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