Invocaciones, tiroteos con Shinra y brillantes combates resaltan una tarde cautivadora con uno de los juegos más anticipados de 2020.
Para este momento, es posible que ya sepas la noticia: finalmente podrás jugar Final Fantasy VII Remake en tu propia casa a través del recién anunciado demo para PS4. Si tienes curiosidad por esta hermosa y reimaginada aventura, descarga el demo y corre a través de la memorable misión del bombardeo. Sorprendió a los jugadores de PS1 en 1997, y estoy muy feliz por decirte que la interpretación de 2020 es igual de fascinante.
Si te perdiste el original o cualquiera de sus subsecuentes re lanzamientos, piensa en el bombardeo como una fría apertura para todo el juego. Te lanzas a una misión que desafía la muerte para sacar un reactor Mako, un dispositivo que la omnipresente Shinra Electric Power Company está usando para alimentar todo tipo de maravillas modernas. El problema es que este proceso puede estar desviando energía desde el planeta, un hecho que Shinra decide ignorar. Naturalmente esto no sienta bien en algunas personas, es decir, los héroes iniciales de Final Fantasy VII.
Una Nueva Experiencia
El demo, y el juego principal, empiezan con Barret, Cloud y el grupo Avalanche llegando a las instalaciones, entrando y plantando bombas en Mako Reactor 1. Una tensa batalla con un jefe se desarrolla, el reactor explota y el demo finaliza. Fue efectivo hace 23 años, y ahora es un viaje salvaje.
Pero donde el demo finaliza, nuestra experiencia empieza. Después de la explosión, Cloud y el equipo escapan bajo tierra y luego se dispersan por las calles. Esta secuencia quizás toma 10 minutos en el juego original, con solo unas escenas y perspectivas de cámara para vendernos la acción. En el remake, Cloud está atravesando callejones, escapando de incendios y cruzando tejados con los soldados de Shinra disparando en cada giro que da. Los civiles yacen heridos en las calles, el caos reina en todas las direcciones y te quedas preguntándote ¿valió la pena el bombardeo?
Y esta secuencia es lo que hace que FFVII Remake llame mi atención. Veo cómo Square Enix planea no solo alargar, sino también enriquecer la experiencia original con momentos y eventos que venden aún más las consecuencias de un ataque tan trascendental. Mientras que el original hizo un excelente trabajo en 1997, el remake de 2020 transmite completamente la destrucción con llamas, NPCs heridos, infraestructuras que se derrumban y en general un tono caótico cuando te disparan los matones de Shinra. Hay tantos momentos cruciales dentro de la ciudad de Midgar que se pueden beneficiar con este tratamiento, así que no puedo esperar a ver cómo se desarrollan en el remake.
El capítulo 2 también suma un encuentro con Aerith y, créelo o no, un flashback/manifestación alucinatoria de Sephiroth. Todo este segmento es nuevo, y realiza un gran trabajo al consolidar la inminente presencia de Sephiroth en el mundo de FFVIIR. Se eleva sobre Cloud no solo en estatura física, sino en confianza, tan capaz como Cloud parece en estos momentos iniciales, es claramente superado por este espectro del pasado. No entraré en las palabras intercambiadas o lo que sucede exactamente, pero es interesante ver lo mucho que FFVIIR va a jugar con los supuestos de los fans. El resultado final parece ser un juego que da la bienvenida a nuevos jugadores, pero que es fresco incluso si conoces el original de principio a fin.
Aquellos que Pelean
Desde este punto nos movemos a otro archivo guardado más adelante en el juego. La experta en combate cuerpo a cuerpo, Tifa, se une a Cloud y Barret, y estamos listos para extraer otro reactor. Como lo puedes determinar a través del demo, el sistema de batalla te pone a atacar para construir las cargas ATB y luego pasar dichas cargas a Habilidades, Conjuros o Artículos. Cada personaje también trae algo único a la batalla, como las balas de largo alcance de Barret o la poderosa postura Punisher de Cloud.
Algunos enemigos son agresivos, otros requieren de un posicionamiento inteligente, el eficiente uso de ATB y utilizar los tres personajes para presionar a los enemigos hacia un estado escalonado. Una vez allí, puedes causar dolor. Los jugadores también reciben la opción de elegir entre este acercamiento orientado a la acción (completo con tiradas de evasión y atajos de control a Habilidades y Hechizos), o un Modo Clásico donde los personajes atacan automáticamente y tú diriges el uso de ATB.
El archivo que jugamos también tenía acceso a poderosa Materia de Invocación. La Materia garantiza hechizos y otras habilidades para los personajes, mientras que Materia de Invocación le da al personaje equipado acceso a esa particular Invocación, en este caso el pilar principal de Final Fantasy, Leviathan. Una vez invocado, el monstruo luchará junto a tu equipo por su propia cuenta o puedes gastar ATB en poderosos ataques (sin dejar de tener acceso a tus propias habilidades ATB). Si el enemigo contra el que estás peleando es débil a los poderes de la Invocación, puedes infligir un gran daño en poco tiempo.
El caso es una batalla contra Abzu, un jefe con el que peleamos después en la sesión demo. En esta instancia tenía a Cloud, Tifa y Aerith en mi equipo, y la última tenía acceso a Ifrit. Él irrumpe en escena con furia… fuego… y se enfrenta a este jefe, dándome el tiempo para sanar y construir cargas. No probé el Modo Clásico pero puedo decir que el enfoque predeterminado te hace considerar cada acción. Mashing Attack es bueno y todo, pero los jefes y enemigos tienen todo tipo de trucos que te hacen cambiar de táctica rápidamente.
Más Midgar
Para cuando nuestra sesión terminó, estaba ansioso de encontrar nueva Materia, experimentar con batallas y mirar más cuánto contenido Square Enix ha agregado a la experiencia original. Casi en cada momento pude recordar el pasado, el encuentro del presidente de Shinra con el trío cerca a uno de los reactores, o un minijuego de solo presionar botones, por ejemplo, han sido totalmente reimaginados y dramatizados de una manera que hace que incluso los momentos familiares se sientan nuevos. Me encanta lo que he visto hasta ahora y no puedo esperar a ver el resto de lo que Midgar tiene para ofrecer.
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