Eric Chahi nos da un recorrido por esta odisea única de realidad virtual.
En Paper Beast, quería que el jugador se sintiera como el primer explorador de una tierra desconocida. Así es como creamos el juego: como un viaje a través de un desierto único donde ningún ser humano ha puesto nunca un pie.
El juego los lleva a descubrir la fauna y flora de origami, metal plegado, coral… Algunos elementos parecen familiares, como el agua y la arena, mientras que otros son más surrealistas, como las criaturas.
A medida que se avanza en el juego, el jugador resuelve puzles y obstáculos, y descubrirá muchas sorpresas. Las criaturas lo ayudan a progresar en su viaje de forma intuitiva, sin palabras, ya que la narración del juego es no verbal.
El jugador comparte un objetivo común con estos animales: progresar y evolucionar en este mundo. Crearán un fuerte vínculo a medida que interactúen y viajen juntos.
Así también es como diseñamos los niveles: como un viaje, como una migración.
El desafío era crear una naturaleza creíble. Gracias a nuestra simulación física de locomoción, los animales se mueven como si tuvieran músculos y huesos.
Esta tecnología es parte principal del juego: el motor calcula el movimiento de las criaturas en tiempo real para que puedan reaccionar a todas las acciones del jugador. Además, las criaturas adaptarán sus movimientos al terreno y a los obstáculos que encuentren.
En este tráiler presentamos cómo el jugador puede manipular el terreno para resolver puzles; por ejemplo, se puede atraer a una criatura para ayudar a construir una presa de arena. El terreno y los diferentes elementos se adaptan automáticamente a las acciones del jugador. El motor del juego lo calcula todo en tiempo real. Algo que se puede apreciar en el video es que, cuando se mueve una bola de arena, deja un rastro en el suelo.
El video se centra en una parte del juego en la que el jugador ayuda a las criaturas de metal a subir una pendiente resbaladiza. El jugador utiliza la arena y las plantas cercanas para moverlas. Manipulan su entorno para poder progresar. Una vez que llegan a su destino, las criaturas usan la fruta del árbol para volar y le indican al jugador cómo continuar el viaje.
La aventura que están a punto de vivir es única, llena de acontecimientos sorprendentes e inesperados. Por eso, Paper Beast es una verdadera odisea de realidad virtual.
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