A principios de esta semana en París, el famoso creador de juegos Michel Ancel presentó el próximo Wild de mundo abierto con una hundida sonrisa. Su entusiasmo y pasión por el proyecto se reflejan en las vistas vertiginosas de Wild, y el propósito de su equipo es claro: potenciar a los jugadores para recorrer un hermoso y peligroso mundo. Dejar que se adapten a las fuerzas de la naturaleza. Y concederles el dominio de los animales de todas las formas y tamaños.
En Wild, los jugadores viven la vida como un chamán hombre o mujer, luchando para sobrevivir en un mundo plagado de depredadores, veneno, e incluso y hasta caníbales que adornan sus cuerpos con huesos. El objetivo de Ancel es comenzar la historia cuando el chamán es joven, y seguirle a medida que su poder y experiencia crecen con el tiempo. Con cada nuevo animal que el chamán aprende a controlar, un nuevo tatuaje se graba en la piel del personaje. Esto ayudará a mostrar la experiencia del jugador cuando intervienen en el juego varios jugadores. Diferentes chamanes mostrarán su sabiduría espiritual con diferentes tatuajes.
Como algunos pueden haber visto durante la rueda de prensa de PlayStation en Paris Games Week, el chamán llegará a entender los nuevos tipos de animales mediante la comunión con poderosas divinidades animales. Hemos visto hasta el momento la divinidad de la serpiente, que se manifiesta como una mujer seductora, astuta, salpicada de escamas. Estas divinidades pedirán cosas al chamán a cambio del poder que tienen, desde hacer un sacrificio hasta vivir la vida como sus animales súbditos. Estas reuniones (y sus pruebas posteriores) seguramente serán un punto culminante del estilo de juego inconcluso de Wild.
Pero Ancel quiere asegurarse de evitar la estructura común de RPG que muchos jugadores podrían esperar. La instrucción “Do X to be a good guy” (Haz X para ser bueno) se elimina a cambio de dar completa posibilidad de selección al jugador. ¿Empezará la vida el chamán aprendiendo a controlar pequeños animales como las ranas? ¿O trabajará más intensamente para dominar animales más fuertes, como lobos u osos? La elección depende totalmente del jugador.
La forma de jugar el momento en Wild es una mezcla de supervivencia y exploración. Los jugadores pueden atravesar el terreno como el chamán, o llamar a animales que les acompañen y puedan llevarles (como el oso que vimos en París). El chamán también puede “poseer” los animales que ha dominado previamente, y ver el mundo desde sus perspectivas únicas, como observar un terreno lejano con los ojos de un halcón, o explorar tribus caníbales sin ser detectado como un conejo. Los jugadores pueden incluso atraer a los depredadores controlando como se comportan las ovejas. Pero si dejas el cuerpo del chamán sin protección, la muerte puede venir con rapidez mientras su espíritu está ausente.
Wild está todavía en etapa prematura de desarrollo, y Ancel nos mostró el modo de juego para varios jugadores en París. Pero su plan es seguir los pasos de Bloodborne, para permitir que los jugadores inviten a otros jugadores a sus mundos, ya sea para ayudar u obstaculizar su progreso.
Wild es una preciosidad, tanto en imágenes como en visión creativa. A medida que el equipo de Ancel continúa construyendo ese mundo, la promesa del viaje del chamán crece. Y aguardamos ansiosamente por conocer otras divinidades que nos concedan el dominio sobre los animales y la naturaleza.
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